Oh Dios Mio

Llendo al grano de este post ya que tiendo a divagar... Te gusta tu amiga, ¿que digo?, a estas alturas se ha convertido en tu mejor amiga. El tiempo ha pasado y habeis ido tejiendo una amistad fortísima entre ambas, la vida te sonrie, ¿o no?

Has intentado tras monólogos internos buscar el momento, si es que existe, de decirle lo que se merece saber.

- ¿Como le digo que me he enamorado de ella? ¡Ella ni siquiera sabe que no soy hetero, nunca fuiste capaz de encontrar el momento, o quizás nunca lo buscaste! -Pero que desastre.

Momento de pánico. Oh dios mio.

Plan A.
Indirectas. Después de un tiempo te das cuenta que eres demasiado sutil, o que el plan es una mierda (perdón por la expresión) una de dos.

Pero todo el mundo sabe que para eso están los plan B. ¿las directas no son un plan? Si, pero no van contigo, por eso de los planes.

Oh dios mio, el pánico se acumula tras descartar el plan B. Pensemos un poco mas, que eso se nos da bien. Pasa el tiempo. No mucho. Tu disfrutas de su amistad y tu mirada muchas veces dice mas que cualquier plan que saquemos de la manga. ¿Ella lo sabe?

Oh dios mio. Empiezas a pensar demasiado. Hasta que un día...

Oh dios mio. Ella te habla de él. Oh dios mio. Tu cara es un poema. Y ahí se ve la amistad, eso siempre ha estado ante todo, ella se lo merece. La mano en el hombro, un abrazo y una sonrisa. Ella es feliz y tu te alegras de que ella sea feliz. La amistad perdurará eternamente. El corazón y sus pedacitos se tendrán que recomponer tarde o temprano. Ya había escuchado alguna vez que la vida no era fácil.

Pero que desastre eres, ¿como puede tu mejor amiga, no saber que eres gay? Oh dios mio, te sientes mal por no tenerla, por ocultárselo y ese miedo de no saber que pasara con vuestra amistad tan bien consagrada. Oh dios mio.